Todo problema tiene solución, hay que buscarla



Por: Aramis Fernández Valderas

Mi problema no tiene solución; me refirió una vecina del barrio.

-¿Por qué?, le pregunté.

- He conversado con el padre de mis hijos para que los atienda y jamás lo hace.



Lo único sin solución es la muerte afirman comúnmente las personas, pero si la tiene, el entierro, es la solución, recordar al fallecido como merece, es otro de los recursos.




-¿De que manera exiges a tu ex esposo la atención?, vuelvo a preguntar.



-De miles formas, lo acusé, le he tirado los calderos por la cabeza. ----Error le dije, dile a tus hijos que se comuniquen con él y le expongan que lo necesita, no eres tu la necesitada, son los hijos.

-Y la receta resultó.



¿Qué hace Usted, cuando se presenta un problema?, ¿Lo enfrenta confiado en que su instinto será capaz de resolverlo?, ¿Lo evita, diciéndose a usted mismo que será muy difícil encontrarle solución?, ¿Espera a que otras personas lo resuelvan?



Generalmente es útil considerar qué tiene de bueno esta situación de  conflicto, y saber que aunque fracasemos y no encontremos una resolución al problema tal cual deseábamos, hay algo que rescatar y aprender.



Si reflexionamos, nos damos cuenta de que el sólo hecho de pensar la situación de una manera distinta, generará nuevas opciones. No hay obligación de responder agresivamente ante un ataque. Uno decide, tenemos  siempre varias opciones.



La clave es ser creativos, encontrar las posibles intenciones positivas que uno puede imaginar, para sacar una enseñanza de la situación.



Conozco de esposos y esposas acusadas de infidelidad por los familiares indistintamente, al paso del tiempo, era real o incierto, pero muchos vuelven, sacaron otras soluciones de la comunicación, primeramente la familia fue la que determinó el pensamiento, ahora son ellos mismos los que piensan, se acabó el problema. Todos tienen solución lo que hay es que buscarla adecuadamente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario